El representante de la subgerencia de Medio Ambiente y Limpieza Pública de la municipalidad de Tarma, Vladimir Yáñez, habló sobre la construcción de la Planta de Tratamiento de Residuos Sólidos, indicando que, “por el momento todo ha quedado en stand by”, “desde la pandemia”, los actos administrativos han sido afectados, tanto del gobierno nacional, como local.
“Pero existe la intención de conversar”, dijo el funcionario, refiriéndose a los representantes del Centro Poblado de Cochas, lugar donde se supone debe de construirse dicha planta. Agregó que están en conversaciones con la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA), sobre los plazos que se deben cumplir, por ejemplo, con la empresa contratista, que había ya iniciado los trabajos, pero se vio obligada a paralizarlos debido a las presiones de parte de la población del sector.
Yáñez indicó que se está en busca de “aliados” para poder continuar con los trabajos, con esta misma intención hay reuniones con el Ministerio del Ambiente, para reunirse con los pobladores de Cochas y tratar de llegar a un acuerdo. Estas aseveraciones contradicen a las del regidor Oscar Baldeón Day, quien dejó entrever que las conversaciones con la comunidad se habían retomado.
La municipalidad de Tarma debe cumplir con una serie de compromisos adquiridos con JICA y con el gobierno, compromisos adquiridos mediante los convenios firmados hace años. Tarma cuenta con un pool de vehículos para la limpieza pública gracias a estos convenios, pero si no se logra la construcción de la planta de residuos sólidos, una de las consecuencias sería la devolución de esos vehículos al gobierno del Japón, además de las multas que Tarma tendría que asumir por no cumplir con lo pactado.