ESTUDIANTES Y DOCENTES DEL INSTITUTO PEDAGÓGICO REALIZARON UNA PROTESTA EXIGIENDO A LA DIRECCIÓN DE LA UGEL QUE ENTREGUE EL DOCUMENTO DONDE SE OFICIALICE LA EXTENSIÓN DE TERRENO QUE LE CORRESPONDE AL GALL.
Los estudiantes y docentes del Instituto Superior Pedagógico Público “Gustavo Allende Llaverìa” (GALL), realizaron una manifestación en las afueras del edifico de la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL) Tarma, exigiendo que les hagan entrega del documento donde se oficialice la extensión específica que le corresponde a esta institución en aras de lograr su licenciamiento.
Provistos de pancartas y con arengas exigían la presencia del director, Everardo Pérez Sáenz, para que les brinde una explicación acerca de este tema que ya tiene varios meses, sin embargo, la respuesta de los funcionarios fue que el funcionario se encontraba en la ciudad de Huancayo, viendo, justamente, ese tema.
DEMASIADA DEMORA.
Hace varios meses hubo un conflicto entre el instituto pedagógico y los padres de familia de la institución educativa del mismo nombre. Los padres del plantel acusaron a los del pedagógico de querer obtener su licenciamiento a costa de “sus” terrenos, ante el entrampamiento que se dio en la solución a este tema, se convocó al director regional de educación, el Econ. Medardo Severo Gómez Miguel.
El “mandamás” de la educación en la región arribó acompañado de varios funcionarios, después de la reunión salió y declaró a la prensa que ya se había solucionado el problema. Que mediante “el diálogo” y la buena predisposición se había solucionado el impase. Agregó que los encargados de concretar los acuerdos eran los funcionarios de ambos entes educativos, sin embargo, como se puede apreciar, a pesar de que supuestamente existe un acuerdo, este no se ha concretado en el papel y, sobre “la hora”, se quieren apresurar los trámites que tienen que ver con el licenciamiento del GALL.
DISCONFORMIDAD.
No obstante, los padres de familia y docentes (al menos un grupo), de la Institución Educativa “Gustavo Allende Llaverìa”, no están conformes con este acuerdo, insisten en que los quieren perjudicar, señalan que los terrenos fueron donados por la comunidad para el colegio, no para el instituto.
A esto hay que adicionar la inconformidad 8justa), porque les ofrecieron que se iban a mejorar las condiciones de los ambientes donde los jóvenes del nivel secundario reciben sus clases, esto no ha ocurrido, por lo que la disconformidad se acrecienta, esta, también podría convertirse, si es que lo es ya, en un óbice para el ansiado licenciamiento del instituto.