El alcalde del distrito de Tapo, Felipe Sedano Calderón, indicó que la celebración de las fiestas costumbristas de enero, no son solo un problema de su localidad, sino de toda la provincia e incluso en todo el país, son actividades que sirven para unir a la población, brindarles alegría esparcimiento, pero ante la actual situación de la emergencia sanitaria nacional y en vista de la tercera ola, estas actividades no pueden desarrollarse como si nada pasara.
Al respecto, se ha coordinado con la subprefectura de Tarma y de Tapo para conversar con los organizadores de estas fiestas, se les ha recomendado que tengan cuidado, que no estamos libres de la pandemia. No se ha dado ninguna autorización, porque no la han solicitado, remarcó la autoridad distrital. También se mostró preocupado porque esas aglomeraciones podrían haber generado muchos contagios, por eso dijo esperar que en algunos días no se incrementen los casos de más afectados por la COVID – 19.
“HAN HECHO OIDOS SORDOS”.
Recordó que en las casas hay personas mayores, personas vulnerables, los niños, pero los organizadores de la fiesta del primero de enero, que están plenamente identificados, “han hecho oídos sordos”.
¿QUÉ PUEDO HACER?
Finalmente se preguntó; “¿qué puedo hacer?, en referencia a la terquedad de la gente que de todas maneras, con o sin permiso, realiza y participa en estas fiestas, llevar a efectivos policiales sería arriesgarlo a las agresiones o ataques de personas que “nunca faltan”. Además aceptó que estos eventos aparte de compartir con la gente y su alegría, también sirven para el lucro de los organizadores.