La subprefecta de Tarma, Lourdes Ventocilla, sostuvo mesas de trabajo la mañana del miércoles. A primera hora se reunió con los vecinos del jirón Asunción y otros colindantes, ellos expresaron de manera contundente su rechazo a que se retome la actividad comercial informal en ese sector de la ciudad donde, por Ordenanza municipal (N° 018), este tipo de comercio está prohibido.
Ellos, los vecinos, argumentaron que la presencia de comercio informal significa un riesgo para ellos como propietarios de inmuebles, recordaron que en más de una oportunidad, precisamente en días de feria, se produjeron emergencias y hubo problemas para el ingreso de las unidades de emergencia. Son varias las razones por las que los vecinos no van a permitir que se retome esa actividad en las zonas donde se ubican sus predios.
Posteriormente se reunió con los representantes del grupo de comerciantes que se muestra reacio a respetar esta ordenanza, ellos defendieron su “derecho” al trabajo, derecho que no ha sido afectado porque en su momento se les ofreció alternativas para poder reubicarse en las nuevas zonas destinadas a las ferias tradicionales (jueves y domingo), sumándose la alternativa de los puestos que existen, sin ocupar, por ejemplo, en el centro comercial Unión Tarma.
CONTAGIOS DE COVID.
La autoridad política indicó que a las cuatro de la tarde se darán a conocer las conclusiones de ambas reuniones. Por otra parte indicó que debido al rebrote de los contagios de la COVID – 19 se hace más complicado el retorno a esas calles. Hay que considerar el hecho que la viruela del mono es otro aspecto que preocupa.
NO HAY INTROMISIÓN.
Lourdes Ventocilla descartó que se trate de una intromisión en las funciones de la municipalidad, refirió que su intervención se debe al desorden que se está suscitando en esas calles, donde hasta ayer permanecía instalada una carpa, se estaban haciendo ollas comunes, incluso se quería realizar esta actividad en la Plaza de Armas de la ciudad.
La municipalidad tiene sus propias competencias y responsabilidades, la subprefectura quiere evitar que se sigan produciendo más desórdenes, haya población vulnerable (ancianos) que están siendo puestos en riesgo. Hay que evitar que este tema sea utilizado “políticamente” para que haya más marchas o manifestaciones.