- Gente inescrupulosa prendió fuego en la parte alta del sector de Curis – Capia, decenas de árboles fueron consumidos por el fuego. Los bomberos laboraron durante horas para conjurar el peligro. La densa humareda era visible desde el centro de la ciudad.
Tarma no está ajena a los incendios forestales que en las últimas semanas vienen asolando varias regiones del Perú con consecuencia gravísimas para la flora y la fauna silvestre. A esto se sum la cifra de muertos que va en aumento, también los daños irreversibles al medioambiente y a los ecosistemas. A pesar de esta situación gente inescrupulosa continúa provocando estos incendios.
El marte, al promediar el mediodía, empezó a observarse una densa humareda proveniente del a parte alta de Curis – Capia, en una zona poblada por árboles, posteriormente los vecinos alarmados solicitaron la presencia de los efectivos de la Compañía de Bomberos de Tarma, para poder apagar el fuego que se extendía rápidamente, en parte por los fuertes vientos y por la seca vegetación.
Decenas de árboles, sobre todo de eucaliptos fueron consumidas por las llamas. Las autoridades aún no han dado detalles acerca de los daños producidos tras este incendio forestal que, recién, en horas de la noche pudo apagarse, luego del trabajo de los bomberos, serenos y algunos vecinos.
El subgerente del área de medioambiente y limpieza pública de la municipalidad de Tarma, indicó que se apoyó a los serenos con la entrega de herramientas, como lampas, para mitigar el avance del fuego. También se apoyó con una cisterna. Hay que señalar que los bomberos de Tarma tampoco tienen e equipamiento idóneo para combatir los incendios forestales.
El incendio provocado la tarde del martes se ubicó muy cerca de zonas pobladas, incluso, relativamente cerca de las instalaciones del Colegio Parroquial San Vicente de Paúl, lo que debería llamar la atención de las autoridades y de la población en general para adoptar medidas severas ante estos incendios provocados por gente insana que no tiene ninguna empatía por la naturaleza y los seres que la habitan.
