A LOS DESÓRDENES REGISTRADOS EL 1º DE NOVIEMBRE SE HA SUMADO EL CAOS QUE SE PRODUJO DURANTE LAS PRIMERAS HORAS DE LA MAÑANA DEL JUEVES CON ABUNDANTES RESIDUOS SÓLIDOS Y DESORDEN VEHICULAR.
A pesar de las disposiciones de la gerencia de la Beneficencia de Tarma, de todas maneras se produjeron desmanes al interior del campo santo de esta ciudad. Se prohibió el ingreso de licor, comida y músicos, pero no se cumplió. Mucha gente logró hacer ingresar estos artículos, incluidos los músicos, algo que de un tiempo a esta parte se ha vuelto una costumbre que no a todo agrada o comparten.
Un vigilante del cementerio reconoció que ayer lograron requisar algunas botellas de licor. Señaló que el número de vigilantes particulares (10), es insuficiente para controlar sobre todo la parte posterior del cementerio que prácticamente es abierta al ingreso de cualquier persona. Esto a pesar que cuentan con el apoyo de los serenos y la policía municipal.
Sin embargo, las afueras del cementerio también presentan un panorama deplorable. Los comerciantes; venden flores, comida, han convertido las calles en botaderos de residuos sólidos, a esto hay que sumar el caos vehicular debido a la presencia de los vehículos que son dejados en las afueras del campo santo, a pesar que, como en otros años, han habilitado la cochera dentro del cementerio.
La visita de las personas al cementerio, debe continuar hasta el fin de semana, incluso del domingo, por eso se espera que se coordine mejor con las autoridades, para evitar los actos incluida la presencia de personas en estado etílico que están generando escándalos, incluso al interior del llamado campo santo.
