- Personas que acudieron al cementerio general de Tarma para visitar los nichos de sus familiares fallecidos, se llevaron la sorpresa de que los vidrios de estas hornacinas. Se quejan de la mala labor del personal de vigilancia.
Personas que acudieron el cementerio general de Tarma para poder visitar los nichos de sus personas queridas cuyos restos descansan en el campo santo se llevaron una gran sorpresa al constatar que los vidrios que recubren estas sepulturas estaban rotos o rajados. El incidente se nota en el pabellón “Celestino Camacho II”.
Cuando los quejosos buscaron a la persona que administra el campo santo, no encontraron a nadie. Ante esta situación buscaron indagar con una persona (de sexo femenino) con uniforme de vigilante, pero les dijo que no sabía lo que había sucedido y que fueran a las oficinas de la beneficencia de Tarma a presentar sus quejas.
Las personas que denunciaron este hecho indicaron que son varios los nichos que han sido vandalizados de la misma forma, lo que denota la falta de vigilancia en el cementerio de Tarma. La administradora, Sharon Landa, señaló que la beneficencia ni el cementerio tienen la responsabilidad de vigilar o garantizar que los nichos no sean violentados. Indicó que tiene otras funciones. Sin embargo, lo que los usuarios indican es que se debería evitar el ingreso de gente bajos los efectos del alcohol o de otras sustancias, se atribuye a este tipo de personas estas acciones vandálicas.