CON ESCEPTICISMO SE RECIBIÓ EL CAMBIO EN LA DIRECCIÓN DE LA RED DE SALUD – TARMA.

El nuevo encargado de dirigir los destinos del hospital Félix Mayorca Soto, es el médico cirujano Albert Orellana Vásquez.

Fiel a su estilo. El gobernador regional Ángel Unchupaico Canchumani determinó el cambio en la Dirección Ejecutiva de la Red de Salud – Tarma, de manera opresiva. Mediante la Resolución Directoral N° 1101-2018, se designó al médico cirujano, Albert Orellana Vásquez como nuevo responsable del antaño, Hospital Regional del Centro.

Según la información, Orellana Vásquez venía laborando en el hospital Francisco de Marini  Caro de Chanchamayo. Este joven profesional se hizo cargo de la dirección del hospital de esta provincia el pasado miércoles 26 de septiembre. Esta determinación tomó por sorpresa a los trabajadores, cuyos representantes esperan que este nuevo director no deje de lado las denuncias que pesan sobre su antecesor por las irregularidades que se le achacan a su gestión, sino que ahonde las investigaciones.

Orellana Vásquez reemplaza en la dirección del hospital al odontólogo Luis Rodríguez Soriano, cuya gestión más allá de ser cuestionada, dejó mucho que desear. Antes de ser cambiado, Rodríguez Soriano hizo noticia al haberse elevado el sueldo de siete mil soles a 9 mil 500 soles, con una resolución de la DIRESA, pero firmada por el jefe de recursos humanos del hospital, Miguel Ramírez Vásquez. El mencionado; Maritza Alcalde Cavero y Mérida Salazar Astete, ganaban 5 mil soles, pero gracias a ciertos “manejos”, pasaron a ganar dos mil soles más, es decir, 7 mil soles.

Este hecho irregular fue denunciado por un militante del propio Junín Sostenible, por el ingeniero José Tipismana Mendoza, quien amenazó con renunciar a su candidatura a la alcaldía  de Tarma, por el mate, si es que esta situación no se corregía. Se ignora a qué acuerdos llegaron, pero lo cierto es que este cambio se da a tres meses de la culminación de la (desastrosa) gestión de Unchupaico Canchumani y compañía. Tal parece que la intención sería “blindar” a Rodríguez Soriano de todas las (supuestas) tropelías que cometió. Con relación al cambio, no se avizoran muchas posibilidades de que la situación mejore en el alicaído Félix Mayorca Soto.

 

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